Están ahí detrás. Pero no sabía cómo se llaman. La tecnología, como tantas otras cosas, los convertirá en historia dentro de nada. Dependiendo de la iluminación que se les aplica, cambian su aspecto. Tienen un nombre como despectivo, LOS FORILLOS. Son ese telón, a menudo pintado a mano, que en el cine se coloca detrás de las puertas y ventanas de los decorados para generar sensación de perspectiva y recrear un escenario natural. Es un trabajo realizado por artistas nada reconocidos, pinturas de ciudades, paisajes de civilizaciones antíguas o planetas lejanos, para dar verosimilitud a la escena. En la era del studio system de Hollywood, cuando rodar en exteriores era muy raro, estos decorados traían el mundo exterior a los platós. Estos enormes fondos artesanales han estado cogiendo polvo desde hace años en los almacenes de la MGM. La empresa que los alquilaba decidió donarlos al Art Directors Guild, que los desenrolló, fotografió y catalogó. Y así descubrieron que...
Espléndido.
ResponderEliminarCreo que fue Miguel Ángel quien trajo por aquí a Blu. Vimos la presentación de una pélicula de animación sobre él en el Animac de Lérida con Teresa, Ernesto (?) y Alberto. Hay en Zaragoza, en la zona de plaza San Felipe-Ecce Hommo dos paredes pintadas por él.
No conocía al otro grafitero.
Ninguno de los dos tiene desperdicio. Muy buenos.
ResponderEliminarSí sí! aquello del Animac era la presentación de un documental que estaba haciento un tipo italiano, Lorenzo Fonda, viajando con Blu por las Américas. Se titula Megunica http://www.megunica.org/
ResponderEliminar